¿Quién paga el coche de sustitución tras un accidente?

Imagina que tienes un accidente de tráfico y tu coche queda inservible durante días o semanas. Mientras esperas la reparación, alquilas un vehículo para poder seguir con tu vida: ir al trabajo, hacer la compra, llevar a tus hijos al colegio. Pasan los días y te preguntas: ¿quién paga este gasto?
La Audiencia Provincial de Madrid ha sido clara al respecto en una reciente sentencia: la aseguradora del conductor responsable del accidente debe pagar el alquiler del coche de sustitución, sin exigir al perjudicado que justifique su necesidad de uso.
Hasta ahora, no estaba tan claro. De hecho, el juzgado de primera instancia había limitado la indemnización a 1.430 euros por lesiones, rechazando cubrir los 1.366 euros de alquiler del vehículo. Sin embargo, la Audiencia estimó el recurso del afectado y dejó sentado un criterio importante: la mera tenencia del coche antes del accidente ya es suficiente para acreditar su necesidad. No hace falta demostrar si lo usabas para trabajar, para ocio o para cualquier otra actividad.
Según los magistrados, el uso del vehículo va implícito en el hecho de tenerlo. Aplicar un criterio más restrictivo pondría en riesgo el principio de reparación íntegra del daño, base fundamental del derecho a indemnización.
Además, la sentencia considera el alquiler del coche como un “daño emergente indemnizable”. Es decir, un perjuicio económico directo provocado por el accidente que debe ser compensado. Aunque, eso sí, se matiza un punto importante: si el vehículo de sustitución fue pagado por una empresa y no por el propio afectado, la indemnización no le corresponde directamente a él, sino a la empresa que asumió ese gasto.
La Audiencia también lanza un mensaje claro sobre el papel del coche en la vida moderna: se ha convertido en un bien de primera necesidad, tanto para trabajar como para el ocio. Por eso, no es válido intentar evaluar en qué casos el uso del coche es “más necesario”. Si tenías coche antes del accidente y ya no puedes usarlo por culpa de otro, tienes derecho a un sustituto… y a que lo pague quien lo ha causado.




